
París explora los futuros posibles de la Amazonia a través del arte autóctono
París, (EFE).
El arte contemporáneo de la Amazonia y las visiones de futuro que sus artistas y comunidades proponen para este vasto territorio -a la vez tan famoso como, en realidad, desconocido en el mundo occidental- se despliegan en una nueva exposición este otoño en París, en el Museo del muelle Branly-Jacques Chirac.

“Todo el mundo ha oído hablar de la Amazonia, pero la gente no sabe realmente de qué se trata. Pensamos a menudo que se trata solo de una selva virgen habitada por indígenas genéricos de los que no sabemos gran cosa”, explicó a EFE Leandro Varison, antropólogo del museo y uno de los dos comisarios de esta muestra, titulada ‘Amazonia. Creaciones y futuros autóctonos’.
Abierta al público desde mañana y hasta el 18 de enero próximo, la exposición combate esas percepciones superficiales y exotizadas acerca de un territorio que se extiende por seis países diferentes y en el que se hablan más de 300 lenguas.

“También estamos hablando de Francia, porque la Guayana Francesa es territorio francés. La frontera más extensa de Francia es la que limita con Brasil, la región con mayor biodiversidad es la de Francia”, recordó Varison sobre esta parte de la Amazonia.
Para mostrarla como el mosaico de culturas que en realidad es, el museo etnográfico parisino invitó a participar en esta muestra a artistas amazónicos, investigadores y colectivos autóctonos cuyas aportaciones -algunas de ellas creadas especialmente para esta exposición- dialogan con los fondos de la colección del propio museo.

Es un recorrido que incluye fotografías, pinturas, objetos cotidianos abandonados por pueblos que viven en completo aislamiento, pequeñas esculturas o artesanías varias, como los tocados del pueblo Krôkrôkti (del territorio amazónico brasileño) elegidos para dar la bienvenida al visitante.
Son elementos que desde Europa se analizan como pertenecientes a la esfera de lo tradicional, apuntó Varison, pero que para estas comunidades autóctonas son arte del siglo XXI.

“Hemos querido interrogarnos sobre esta categoría de arte contemporáneo, para mostrar una contemporaneidad vista por los autóctonos”, detalló este antropólogo y también director adjunto del departamento de investigación y enseñanza del Museo del muelle Branly-Jacques Chirac.
Futuros de preservación
Frente a la idea eurocéntrica que imagina la Amazonia como un lugar anclado en el pasado, la exposición la defiende también como un espacio de creación de futuros, en toda su pluralidad. Y concretamente de futuros de preservación, compartidos con toda la humanidad, frente al proyecto de “destrucción” que impone el capitalismo globalizado.

“Nos encontramos ante una visión paradójica, porque o bien queremos desarrollar la Amazonia, queremos transformar la selva en pastos, en campos de soja para criar ganado, o bien queremos preservar la Amazonia, es decir, queremos ponerle una campana”, reflexionó Varison.
Son los propios artistas autóctonos -quienes a menudo reparten sus vidas entre el mundo urbano y sus comunidades- los que proponen salidas para esas aparentes contradicciones.

Es el caso del pintor colombiano de origen inga Carlos Jacanamijoy, quien a través de los colores y la abstracción abre “portales” que conectan con sus antepasados chamanes.
“La pintura me ha salvado la vida prácticamente”, admitió a EFE Jacanamijoy, quien ante el lienzo se propone sobre todo “romper estereotipos” con creaciones sinestésicas que atacan los sentidos a través del color.

“Lo que yo pinto es para que el espectador sienta como que se le abre un portal para ingresar a un mundo en el que hay seres humanos que tienen una relación estrecha con la naturaleza”, precisó el artista.
La muestra reflexiona igualmente sobre temas de debate tan actuales como las repatriaciones de los objetos artísticos espoliados que están en manos de los grandes museos occidentales.

En este caso se plantea desde una dimensión diferente, a través de la presencia de artistas como el peruano Brus Rubio Churay, quien a través de la colección del Museo del muelle Branly-Jacques Chirac pudo rastrear y reconstruir la mitología perdida de los antiguos habitantes de su Pucaurquillo natal y plasmarla en sus cuadros.
Otras visiones, como la del brasileño Denilson Baniwa, quien ejerció también como comisario de esta muestra, cuestionan el contacto con los blancos como si fueran “extraterrestres” con capacidad para “destruir el mundo”, según explicó él mismo este lunes.

“No es verdad que la Amazonia sea un lugar intocable o remoto, hay muchos puntos de encuentro”, insistió Baniwa durante la presentación de la exposición a la prensa.
Nerea González
